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15 mayo, 2024
Entrevistamos a Ricardo Oharriz, socio gerente de DOSAM, la primera empresa en alcanzar nuestra verificación de huella de carbono. ¡Conocé este caso de éxito!
El principal desafío ha sido el de obtener datos verificables de toda la cadena productiva. En nuestro caso, realizamos el estudio de dos productos, uno que utiliza 100% material virgen y otro que utiliza material virgen con un 33% de plástico recuperado del mismo sistema, desde el momento de obtención de las materias primas hasta su disposición final.
Esto llevó a que la etapa de recabado de datos fuera bastante trabajosa, debido a que la cadena productiva contiene muchas etapas y que no es usual en nuestra industria este tipo de consultas.
De todas formas, cuando les contábamos que estábamos trabajando en medir y verificar la huella de carbono (HdC) de nuestros productos, siempre hubo mucha predisposición por ayudar por parte de todos los actores involucrados.
Asimismo, contamos con el apoyo de Quanta Consultora para la realización de las mediciones, los formatos y cálculos, lo que lo volvió mucho más liviano para nosotros.
En primer lugar, nos permite conocer en qué lugar estamos hoy, entendiendo cuánto impactamos con un envase tradicional contra uno que contiene material recuperado del sistema, así como también cómo impacta cada una de las etapas en el resultado final.
Con esta información, que compartimos con los distintos actores de la cadena, podemos definir dónde trabajar para lograr la mayor disminución posible de la HdC.
Este es un resultado que solamente puede modificarse con una doble dinámica: a través del trabajo de cada uno de los eslabones en particular y de todos en conjunto.
Esta verificación demuestra el compromiso y el trabajo que muchas veces realizamos las organizaciones de forma silenciosa, por nuestras propias filosofías.
Es por esto que genera un impacto muy positivo en la imagen de la empresa, en los empleados y la comunidad, demostrando que buscamos algo superior al rédito únicamente económico.
Las certificaciones de calidad y ambiente son parte de nuestra identidad, ya que siempre apuntamos al máximo de calidad, procurando el menor impacto ambiental posible.
Estas certificaciones son clave para demostrar nuestro compromiso a nuestros empleados, clientes, proveedores y la comunidad en general.
Es aquí donde IRAM toma gran relevancia, porque las certificaciones toman la credibilidad de los entes que las realizan e IRAM es una entidad con una marcada trayectoria de seriedad y confiabilidad, siendo un organismo reconocido a nivel nacional e internacional.
Apuntamos a seguir disminuyendo la HdC y realizar una nueva verificación durante 2024 para demostrar la mejora continua que estamos buscando.
A su vez, con ese mismo espíritu, proyectamos certificar ISO 45000, demostrando nuestro compromiso con la seguridad de nuestro personal.
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